Muy agradable, muy cerca de la plaza mayor, se puede aparcar en la puerta, tiene estacionamiento pero nuestra camioneta no pasaba por la puerta, nos tocó una habitación al frente con un pequeño balcón y una vista muy linda a los antiguos edificios. Desayuno muy bien, un pequeño buffet, con lo necesario. Tiene un patio grande con naranjos. La puerta se cierra a las 10 y te dan una llave para entrar.